El globo navegaba por debajo de las nubes del espeso bosque, entre el cielo y los animales, estos viéndolo como otro animal extraño, nuevo, volátil, rojo, inflamado, sin alas, pensaban que capaz seria otra especie sin rumbo y con simpleza física, los monos trepados en frondosos bosques querían atraparlo, pero muy alto se encontraba, ni sus proyectiles de semillas daban podían derribarlo, quedaron resignados por esta situación y empezaron a saludarlo como a un viejo amigo que se va hacia otros cielos, este globo paso por varias lluvias y terribles nevadas, pero siguió volando por los empujones del viento, como buscando algo, hasta que por fin decidió la naturaleza del aire bajarlo justo donde se encontraba una plaza pequeña, sin juegos y donde un niño no le quedo otra opción que jugar con lo que tenia a mano, arena, piedras y algunos insectos, con gran sorpresa ve un circulo rojo que se atora en uno de los árboles cercanos y corre a socorrer lo nuevo acontecido, sin esfuerzos libero al globo y no voló alto, quedo instalado en la mano del pequeño, un nuevo amigo volador aparece en sus juegos.
Por Kosmisch
¡Que belleza encierra tu relato¡.Maravilloso.Besos inmensos de luz y paz.
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