No buscaba encontrarte, pero en aquel globo volabas, te movías con presteza y elegancia, sabiendo donde te dirigías, con el oxigeno puesto en tus proyectos y arrogancias, te vi venir, el viento movía tus direcciones, me invitaste a pasar y te tome de la mano, saliste del globo y preferiste caminar junto a mi mano, hacia las gaviotas y allí darles de comer.
Por Kosmisch
Muy bellos pensamientos.
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